¿Por qué las viviendas sociales tienen fachadas de colores?.

 

¿Por qué las viviendas sociales tienen fachadas de colores? es una exposición monográfica de Jorge Isla (Huesca, 1992) en la Sala de exposiciones de la Diputación Provincial de Huesca centrada en el Grupo Villa Isabel de Huesca. Un conjunto de viviendas adosadas y ubicadas en el centro de la ciudad que, en su origen, ubicadas en la periferia de la ciudad, estuvo amparada en la Ley de Casas Baratas de 1911.

 

El origen del proyecto toma como punto de partida este grupo o Unión de viviendas que ejemplifican la respuesta al «problema de la vivienda» cuyo origen se relaciona con los procesos de industrialización surgidos a finales del siglo XIX y comienzos del XX y, por ende, el consiguiente desplazamiento de población desde entornos rurales a las ciudades. La necesidad de alojamiento para la clase obrera y la preocupación por las condiciones insalubres de higiene y habitabilidad de las viviendas se desarrolló, en paralelo, a la necesidad de expansión urbana de las ciudades y justificó la aparición de una normativa jurídica sobre “casas baratas”.

 

La exposición, concebida específicamente para la sala de exposiciones de la Diputación Provincial de Huesca, y tomando lo anterior como punto de partida,  presenta un eje central con material del archivo municipal de Huesca que incluye el expediente de autorización de construcción y planos originales, junto con una serie de fotografías fechadas entre 1925 y 1975, y realizadas por Ildefonso San Agustín, Rodolfo Albasini, Santos Baso, Hermanos Viñuales, Manuel Fanlo e Ismael Pascual del lugar en el que se llevó a cabo la intervención urbanística, todas ellas procedentes de los fondos de la Fototeca de la Diputación Provincial de Huesca.

 

Rodeando este material historiográfico, y como si de una piel se tratase, se han instalado en las salas contiguas 64 pinturas monocromáticas que se corresponden a los 64 colores de cada una de las fachadas que componen Villa Isabel en la actualidad. Las pinturas, de 80x120cm, donde la suma de su perímetro establece 1m2, manifiesta una referencia directa respecto a la especulación inmobiliaria, artística y de la imagen hoy en día.

 

La instalación invita a reflexionar sobre la historia y evolución de este conjunto residencial, así como sobre las circunstancias históricas, políticas y económicas que lo rodean, donde esas fachadas, que han cambiado con el tiempo, reflejan la transformación urbana y la pérdida de homogeneidad, señalando la influencia del individualismo en la sociedad contemporánea estableciendo un reflejo del contexto global en una situación tan local e íntima como en un grupo de viviendas de la ciudad de Huesca.

 

Paralelamente a la exposición, se ha editado una publicación que recoge los resultados de la investigación, con textos de Jorge Isla, del investigador y también artista Juan Pablo Ordúñez y de Carlos Copertone, comisario y editor especializado en urbanismo y ordenación del territorio.